Vista el 4 de febrero de 2011. Cinesa Proyecciones. Madrid.
Estimulante propuesta del director británico Danny Boyle, ganador del Oscar por Slumdog Millionaire. Con una estética cercana al videoclip, Boyle nos cuenta un suceso real: el accidente que sufrió el joven Aron Ralston mientras practicaba barranquismo en un hermoso paraje rocoso de Utah. En una caida, su brazo queda atrapado por una pesada roca y le impide moverse. Las 127 horas del título son las que pasó Aron luchando por su supervivencia, llegando a tomar una valiente decisión que le valió conservar la vida.
Puede decirse por tanto que el principal reto de la película era c
onservar la tensión en un entorno tan reducido (el fondo de un oscuro barranco) durante tanto tiempo. Para ello Boyle se sirve de la estupenda interpretación de James Franco, absolutamente convincente, y de diversos recursos narrativos como flashbacks, visiones del personaje o grabaciones de sí mismo que hace el protagonista con su propia cámara para escapar de la locura. Otro problema era mantener el interés del espectador en una historia cuyo final, por ser real, conoce de antemano. También se salva el escollo porque el ritmo no decae en ningún momento y porque Boyle sabe transmitirnos la angustia de su protagonista. La secuencia final donde aparece el verdado Aron con su esposa e hijo nos redime de todo el sufrimiento previo y nos hace celebrar el buen final de esta increíble historia de superación personal.