
Thriller coproducido entre España y México, de interesante argumento que resulta absolutamente desaprovechado. Protagonizado por el televisivo Diego Martín (Policías, Aquí no hay quien viva, y sobre todo, Hermanos y detectives), Antonio Dechent, la mexicana Ana Claudia Talancón (El crimen del padre Amaro) y el argentino Federico Luppi, el filme narra la historia de una fanática secta religiosa, obsesionada con asesinar de forma ritual a 36 hombres "justos" repartidos por el mundo, para así librarse de la maldad en la Tierra.
Teo, el fotógrafo interpretado por Diego Martín, es supuestamente el último de estos hombres justos, y será por ello perseguido sin descanso para su aniquilación.
El problema es que, ya sea por falta de presupuesto, por desgana, o por falta de talento, el filme carece del ritmo necesario para dotar de interés y emoción a la trama. El guión flojea en algunos momentos, la música resulta penosa, y el final es precipitado e insustancial.
El resultado es un "quiero pero no puedo" que empieza a resultar habitual cuando el cine español pretende abarcar una película de género distino a la crónica social. Aunque me fastidie reconocerlo, en ese campo tenemos mucho que aprender de los americanos.
Web oficial (podéis ver aquí el trailer)
Lo mejor: El intento de hacer algo diferente
Lo peor: La falta de ritmo
Nota: 4,5
Cine y día: 6-3-2008, Los cuadernillos (Alcalá de Henares), sesión 18:00