
Alien, el octavo pasajero ♥♥♥♥
1979 Ridley Scott
Ficha en imdb
Artículo de wikipedia
Aliens: El regreso ♥♥♥
1986 James Cameron
Ficha en imdb
Alien 3 ♥♥♥
1992 David Fincher
Ficha en imdb
Alien Resurrección ♥♥♥♥
1997 Jean Pierre Jeunet
Ficha en imdb
Vistas en Noviembre y Diciembre de 2010, dvd.
Madrid y Salamanca.
Nos encontramos ante una de las más afamadas y prolíficas sagas cinematográficas, de las mejores dentro de su género (terror-ciencia ficción). Hasta este momento, la serie cuenta con cuatro títulos, cada uno de ellos dirigido por un director diferente, y que abarcan casi veinte años. Este rasgo identificativo hace que, dentro de la unidad temática, y sobre todo visual, los filmes tengan personalidad propia.
La primera fue dirigida en el ya lejano 79 por Ridley Scott, y pese al look ochentero derrocha imaginación. Los siete tripulantes de la nave Nostromo, en aparente vuelo comercial, recalan en un planeta donde un extraño ser se adhiere al rostro de uno de ellos. Pronto se descubrirá que no es más que una cría de una monstruosa y sanguinaria criatura que necesita de un organismo humano para desarrollarse. Una vez que el Alien abandona el cuerpo huésped, el peligro acechará a todos los tripulantes del Nostromo. La valerosa teniente Ripley, interpretada por la gran Sigourney Weaver, será la única superviviente.
La segunda se estrenó 7 años después, y fue dirigida por James Cameron. Continúa con el espíritu de su predecesora, y en esta ocasión un batallón de soldados (junto con la teniente Ripley) regresará al planeta donde habitan las criaturas con la supuesta intención de acabar con ellas. Pero, finalmente, parece que hay quien tiene interés (económico) en que los monstruos sigan con vida. En este caso, hay varios Aliens contra los que luchar, en lugar de una única criatura, y por ello la acción y el ritmo es mayor.
La tercera, dirigida por David Fincher en el 92, es más moderna y sofisticada, al menos en su concepción visual. El monstruo se estiliza y la acción se traslada a un planeta-cárcel sobre el que cae la nave de Ripley, que no está todo lo limpia que debiera. El alien toma posesión del nuevo espacio y causará numerosas bajas entre los reclusos, que para colmo son degenerados que tienen un fallo genético. Oscura, y más dramática que las anteriores.
La última de la saga (al menos hasta que Ridley Scott lleve a cabo sus dos anunciadas precuelas), es la más exótica. El francés Jean Pierre Jeunet, director de obras tan especiales como Delicatessen, La ciudad de los niños perdidos, o la archifamosa Amelie, imprime su peculiar estilo al filme. Gótica, dura y densa.
En general, una saga de muy buen nivel cinematográfico que, además, resulta de lo más entretenida. Un monstruo que perdurará en el imaginario colectivo, y un personaje femenino (Ripley) de los que dejan huella.
Nos encontramos ante una de las más afamadas y prolíficas sagas cinematográficas, de las mejores dentro de su género (terror-ciencia ficción). Hasta este momento, la serie cuenta con cuatro títulos, cada uno de ellos dirigido por un director diferente, y que abarcan casi veinte años. Este rasgo identificativo hace que, dentro de la unidad temática, y sobre todo visual, los filmes tengan personalidad propia.
La primera fue dirigida en el ya lejano 79 por Ridley Scott, y pese al look ochentero derrocha imaginación. Los siete tripulantes de la nave Nostromo, en aparente vuelo comercial, recalan en un planeta donde un extraño ser se adhiere al rostro de uno de ellos. Pronto se descubrirá que no es más que una cría de una monstruosa y sanguinaria criatura que necesita de un organismo humano para desarrollarse. Una vez que el Alien abandona el cuerpo huésped, el peligro acechará a todos los tripulantes del Nostromo. La valerosa teniente Ripley, interpretada por la gran Sigourney Weaver, será la única superviviente.
La segunda se estrenó 7 años después, y fue dirigida por James Cameron. Continúa con el espíritu de su predecesora, y en esta ocasión un batallón de soldados (junto con la teniente Ripley) regresará al planeta donde habitan las criaturas con la supuesta intención de acabar con ellas. Pero, finalmente, parece que hay quien tiene interés (económico) en que los monstruos sigan con vida. En este caso, hay varios Aliens contra los que luchar, en lugar de una única criatura, y por ello la acción y el ritmo es mayor.
La tercera, dirigida por David Fincher en el 92, es más moderna y sofisticada, al menos en su concepción visual. El monstruo se estiliza y la acción se traslada a un planeta-cárcel sobre el que cae la nave de Ripley, que no está todo lo limpia que debiera. El alien toma posesión del nuevo espacio y causará numerosas bajas entre los reclusos, que para colmo son degenerados que tienen un fallo genético. Oscura, y más dramática que las anteriores.
La última de la saga (al menos hasta que Ridley Scott lleve a cabo sus dos anunciadas precuelas), es la más exótica. El francés Jean Pierre Jeunet, director de obras tan especiales como Delicatessen, La ciudad de los niños perdidos, o la archifamosa Amelie, imprime su peculiar estilo al filme. Gótica, dura y densa.
En general, una saga de muy buen nivel cinematográfico que, además, resulta de lo más entretenida. Un monstruo que perdurará en el imaginario colectivo, y un personaje femenino (Ripley) de los que dejan huella.
PD: En el título figura la puntuación media de la saga, y en cada título figura la puntuación individualizada